Elantris es una ciudad mágica. Sus habitantes tienen poderes mágicos que se materializan mediante el dibujo en el aire de unos aones, una especie de mándala. Pero hace diez años una catástrofe sumió a la ciudad en la decadencia y fue abandonada a su destino. La magia se perdió y sus habitantes ahora son como muertos vivientes. Sus corazones no laten. Sus cuerpos no curan y no necesitan comer pero el hambre es acuciante.
No obstante la magia sigue haciéndose presente entre los habitantes de la ciudad aledaña. Los enfermos tienen una especie de vitíligo y son arrojados dentro de las murallas de Elantris. El último de ellos el príncipe heredero de la ciudad de Kae.
Al día siguiente de ser encerrado en Elantris, llega en barco su prometida, una princesa de un reino cercano, que nada más llegar se encuentra que por contrato está casada y viuda al mismo tiempo. En pocos días se da cuenta de que el rey es un tirano y se pone en contacto con un grupo de nobles que pretende derrocarle.
También llega un clérigo de una belicosa religión que intenta conquistar el mundo para su dios y que manipulando aquí y allá intentará instalar un rey títere en el trono.
El príncipe por su parte intenta arreglar Elantris o por lo menos hacerla más habitable para sus vecinos. Esto le hará enfrentarse con los clanes rivales que antes de llegar él controlaban la ciudad.
Esto es a grandes rasgos la historia.
Un buen libro de fantasía fuera de los cauces trillados de magos, guerreros y magia potagía. El Autor crea un Universo muy completo y que podría dar bastante juego. No sé si hay más libros que continúan esta historia pero no me extrañaría.
A veces la envoltura me recuerda a Dune con los distintos reinos o casas y las religiones siempre en conflicto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario