Este novelón cuenta la historia de uno de los personajes más importantes de la Historia del Japón. Es pues la vida de Hideyoshi Toyotomi que pasó de ser el hijo de un samurai rural venido a menos, a gobernante de todo el país. Poco a poco y en parte debido a su gran inteligencia, fue escalando posiciones en la rígida escala social de su época (siglo XVI del calendario occidental), hasta que alcanzó el puesto de daimio, algo así como el presidente del gobierno, por encima del cual sólo estaba el emperador.
La verdad es que me he aburrido bastante. Los primeros libros son amenos y tienen más de novela que de historia. Al no tener datos ciertos de su vida, el autor se permite fantasear y novelar, pero a medida que avanza la historia y su vida va siendo más conocida y existen más datos, el libro se va haciendo cada vez más pesado. Tampoco ayuda mucho el desconocimiento que yo, desocupado lector, tengo tanto de la geografía japonesa, como de los clanes y familias gobernantes de aquella época. El autor está bien informado y da prólijos detalles que llegan a abrumar. El hecho, además, de la desmedida extensión del libro tampoco ayuda mucho.
Y como el libro es un poco rollo ahí va un chiste de japoneses:
Están un chino, un japones y un español charlando de todo un poco, cuando el chino dice:
- en mi pueblo tenemos a la persona que tiene el nombre más corto del mundo: O
entonces el japones riéndose dice:
- eso no es nada en mi país tenemos una marca de relojes que se llama CasiO
y el español contesta:
- pues ni O, ni Casio, en mi pueblo hay un Nicasio.
Perdón. Lo siento.
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