Este libro se encarga de estudiar la Edad Media desde un aspecto poco usual. Vamos, poco usual por que lo dice el autor, porque yo no sé si realmente es usual o no. No soy un experto en el tema y cualquier libro que me leyera me parecería novedoso.
El caso es que el autor se fija en los sistemas fiscales de los distintos territorios europeos para intentar dar una imagen de conjunto a todo esta época. Su tesis consiste en determinar el desarrollo de los sistemas impositivos durante los mil años, desde el 500 al 1500 d.C. que ocupan la Edad Media. Son fechas aproximadas de las caidas de los imperios romanos de occidente y de oriente respectivamente.
Después de la caida del Roma, el imperio o más bien, su administración y sistema fiscal no desaparecieron con él. Fueron sufriendo una serie de adaptaciones locales: así, en la alta Edad Media, los visigodos, los godos, posteriormente los merovingios, los carolingios, y ya en la baja Edad Media los reinos y señoríos que darían con el correr de los siglos paso a los estados modernos. Y todos estos casos el grado de madurez de su sistema impositivo nos da una buena idea de cómo de avanzado era cada territorio.
También se ocupa de otros asuntos como el comercio, el papel de las mujeres, o la cultura.
Es un libro que intenta dar una visión de conjunto de cómo fue aquella época, muy alejada de la oscuridad en la que nos hemos instalado.
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