Ian "Lemmy" Kilmister fue, para quien no lo sepa, el líder de Motörhead. Y Motörhead no fue un taller de reparaciones ni nada similar, Motörhead fue una de las bandas pioneras del Heavy Metal. Arrancaron allá por los años '70 y hasta escasos días antes de la muerte de Lemmy, estuvieron en activo.
El libro está narrado en un lenguaje directo y no se muerde la lengua. Dice lo que quiere decir y como quiere decirlo, sin importarle si a alguno le molesta. Él mismo lo reconoce y te recomienda que si te molestas fácilmente no leas su libro.
Desde pequeño siempre anduvo metido en líos y desde que cogió por primera vez una guitarra entró de lleno en la vorágine del circo del Rock and Roll. El resto de su vida estuvo guiado por el trillado lema de sexo, drogas y R'n'R. Nos cuenta un sinfin de anécdotas, algunas realmente tronchantes, con casi todas las personas más reconocidas del mundillo: Desde Jimmy Hendrix a Syd Vicius o Lars Ulrich, que incluso fue presidente de su club de fans e involuntario modelo en la carpeta del Orgasmatron, en donde aparece dormido, rodeado de su propio vómito; Ozzy Osbourne, del que fue buen amigo, etc.
En definitiva, una intensa vida, bien vivida a su manera. Aquellos que le conocieron bien, hablan de un tío amable, culto y muy divertido, al que no le dio el sol en las piernas hasta 1992.
Viene adobado con un puñado de fotografías, un tanto repetitivas. Se echa en falta algo más de variedad.
Unos pocos meses antes de morir dio este concierto, no fue el último pero casi:
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