Es probable que para muchos Desocupados Lectores el nombre del Autor no les diga nada. Y si encima ese mismo Desocupado Lector ha nacido con posterioridad a 1985, el desconocimiento puede alcanzar dimensiones siderales.
Sí es probable que si digo que también es conocido como Johnny Rotten, ya puede que suene un poco más.
Y ya por fin, si digo que fue el cantante de los Sex Pistols ya seguro que por lo menos sonará de algo.
Pues sí este mismo el la autobiografía que nos ocupa.
Empecemos por el principio.
John nació en un barrio popular de Londres, hijo de una jovencísima pareja de origen irlandés. Pasó una infancia feliz pese a las estrecheces económicas, y a los ocho años contrajo una meningitis que le tuvo hospitalizado medio año. Cuando mejoró un poco no recordaba nada, ni siquiera a sus padres y debió aprender a realizar tareas tan comunes como hablar y leer. Poco a poco se recuperó pero le quedaron secuelas que aún hoy se pueden apreciar en su forma de moverse.
No destacó en el colegio y empezó a trabajar de albañil muy jovencito. A mediados de los 70 el ambiente de los jóvenes londinenses estaba cambiando. Ya casi no había hipis y se respiraba otro ambiente. El centro de esa movida era Sex, la tienda de ropa de Viviane Westwood y Malcom Maclaren. Allí se daban cita todos aquellos jóvenes que luego se harían famosos: gente de los Clash, las Slits o de los Sex Pistols fueron habituales de esa tienda.
Si lees este libro no te va a quedar nada claro el origen de los Sex Pistols. Apenas un par de esbozos. Lo que el Autor quiere dejar meridianamente claro es que Él es el catalizador que hizo que la banda alcanzará las alturas a las que llegó.
Siempre según Él, Maclaren, manager de la banda, era más un estorbo que otra cosa: les anulaba bolos, quería decidir que ropa debían ponerse, como peinarse y como comportarse. La música era lo de menos.
Lydon empezó a ocuparse de la letras y Steve Jones, guitarra, Paul Cook, batería y Glen Matlock, bajo, de la música. A lo largo de los dos años y medio que tuvieron de vida los Pistols protagonizaron varios escándalos muy sonados que sacudieron el establishment inglés y fueron vetados por la BBC y otros medios de comunicación. También las discusiones y choques entre los miembros del grupo entre sí y con Maclaren fueron constantes.
Después de una gira por Estados Unidos el grupo se disolvió y cada miembro se fue por su lado dejando un Lp y un puñado de sencillos que influyeron determinantemente en toda la música rock posterior. El Never Mind The Bollocks es quizás el dísco más influyente de la música, aunque puede que no todos estén de acuerdo con esto.
Después de la separación Lydon, tenía prohibido usar su apellido artístico hasta que lo recuperó muchos años después tras un largo procedimiento judicial, formó su propio grupo: Public Image Limited, o más conocido por PiL.
Los cuarenta años que han pasado desde entonces no tienen demasiada chicha. Discos, muchos músicos diferentes, con los que no siempre acabó bien y canciones que han pasado desapercibidas para la mayor parte de la gente.
También ha desarrollado una pequeña carrera televisiva participando en realitys y haciendo documentales de naturaleza con gorilas y tiburones. Iba a interpretar a Herodes en Jesucristo Superestar pero la producción no llegó a realizarse.
Lydon o Rotten es un personaje que no te dejará indiferente. Cuenta su vida en el libro, pero cuenta mucho más de sus opiniones y su percepción del mundo y de la sociedad. Así que te das cuenta de cómo es en realidad. A mí me parece que se cree más importante de lo que realmente es. Tuvo un periodo de lucidez que le alcanzó de pleno en el momento y lugar adecuado. Su obra con los Pistols ha sido muy influyente pero el mundo no gira gracias a él.
Es un tipo excesivo y no debe ser de fácil trato. Aunque según va avanzando el libro se va aplacando esa ira, y alcanza su lado más humano cuando Nora, su mujer, y él deben hacerse cargo de los nietos de ella. Nora era la madre de Ari Up, vocalista de las Slits que falleció de cáncer bastante joven. Ya la conocimos en el libro de Viv Albertine.
Una anécdota bastante reveladora del carácter de este personaje.
Una día iban en un taxi él y Nora por el centro de Londres y se metieron en un atasco. Cuando llegaron a la altura de Harrods una pareja les vio y se acercaron al taxi. Golpearon la ventanilla y saludaron: Eh, John, ¿Cómo va eso?
Lydon agobiado ordenó al taxista que acelerara y saliera de allí lo antes posible.
Nora le dijo: ¿A qué coño ha venido eso? ¿Sabes que era Paul Mcartney?
Años después Lydon se disculpó con Mcartney y éste aceptó sus disculpas.
Los Pistols se han reunido un par de veces después de la disolución y en 2007 tocaron cinco días consecutivos en la Brixton Academy La verdad es que el concierto es brutal, aunque puede que algo tenga que ver el hábil montaje del director.
He omitido intencionadamente al otro bajista del grupo. La verdad es que es más famoso por su muerte que por su aportación al grupo.
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